El tomate es una hortaliza baja en sodio, por lo que, también, es muy recomendada en hipertensos.
Es rica en fibra, sobretodo si se come con su piel.
Aporta vitaminas (sobretodo vitaminas del complejo B, C, A y E)
Ayuda a hacer bien la digestión.
Importante es a su vez su contenido en minerales, del que destaca el potasio, aunque también posee fósforo, magnesio y calcio, entre muchos otros.